Ayer tuvo lugar el pase para prensa y la presentación del documental en el cine «Embajadores» de Madrid.
El próximo 18 de mayo, la plataforma Movistar Plus+ estrenará «19, Solos frente a la verdad”, un documental testimonial cargado de verdad y piel en el que once actores y actrices consagrados de nuestro país nos cuentan su experiencia sobre cómo vivieron aquellos momentos de desconcierto e incertidumbre que vivimos durante el encierro en pandemia, siempre desde un punto de vista positivo.
El evento contó con la presencia de varios actores protagonistas
Marián Álvarez, María Castro, Fele Martínez, Belén Rueda, Jorge Sanz, Luis Tosar, Unax Ugalde, Imanol Arias, Alicia Borrachero, Lolita Flores y Javier Gutiérrez han sido los protagonistas de este documento testimonial de 60 minutos de duración. Un plantel idílico de profesionales absolutamente consagrados y envidiable para cualquier productor audiovisual.

El director, Javier Kuhn pensó en una atmósfera íntima, con una puesta en escena mínima: tan solo una silla en mitad de una habitación. Desde ella y con un fondo oscuro, sin distracciones, cada uno de los protagonistas pudo narrar con total libertad su experiencia, desde el corazón, sin interrupciones. Los primeros planos de manos y rostro, así como la escena rodada en blanco y negro, han conseguido lograr un nexo único entre actor y espectador, donde parecen dirigirse a cada uno de manera individual a través de todo un viaje emocional. Un producto tremendamente humano cargado de sinceridad.

Durante la rueda de prensa posterior, varios de los protagonistas se sinceraron con los asistentes al contar su experiencia. Palabras como “pandemia” o “COVID” no son nombradas en ningún momento a este respecto. Imanol Arias, que decidió pasar el encierro en soledad, ha destacado: “Yo siempre recibí la idea de que deberíamos hablar de lo que no se nombra, esa era la pauta. Hablar profundamente de algo que no se debe nombrar para no caer en el mismo mecanismo de análisis de la situación. La libertad de rodaje suponía la elección del momento adecuado, cuando podías. También creo que no entendimos bien qué nos pasaba hasta que lo vivimos. De alguna manera, esto es tener el corazón en la mano, tener la ficción de la realidad en la mano.”
El balance posterior

Para Alicia Borrachero esta experiencia supuso primero pensar qué era lo que le gustaría compartir con el espectador. Para eso conectó con lo que había sido su propia vivencia. “Pero luego a la hora de hacerlo, fue como algo muy hondo, sinceramente, porque según iba hablando me iba dando cuenta de cosas. Sabía de qué quería hablar, pero se me revelaron cosas durante el rodaje que ni yo me había parado a pensar. Y todo esto fue gracias a la invitación de poder compartir esto. Personalmente, me he llevado como más conciencia de algunas cosas que me pasaron y que ni me había parado a ver”.

Lolita Flores resaltó que le queda la memoria de “lo mal que lo pasamos”. Con nota humorística, explicó: “Mi perro nunca ha salido más veces en su vida. Me ha quedado un mal sabor de boca por el tiempo que pasamos y un buen sabor de boca porque en ese momento aproveché para estar con mi hijo, hacer cosas, inventarme una productora, hacer una obra de teatro para materializarla en cuanto pudiésemos salir y guardar en la memoria. Porque nos olvidamos muy pronto de las cosas. Lo que quisiera es que no volviésemos a estar encerrados nunca. Yo soy una privilegiada porque he estado encerrada en una cárcel de oro”.

Para Javier Gutiérrez, los actores siempre andan escondiéndose detrás de un texto de un personaje, explicó: “Para mí, desnudarme de una forma tan descarnada y tan honesta fue lo más difícil. Si de algo me ha servido este documental es para darme cuenta de todo lo que hemos sufrido, porque creo que pasamos muy por encima de las cosas. La velocidad a la que vivimos es tal que no tenemos ningún momento de pausa y yo creo que este documental es necesario para rescatar esa pausa y ser conscientes de lo que hemos vivido y lo que hemos sufrido. Y dónde estábamos y dónde estamos ahora mismo. Para mí, ha sido un trabajo muy descarnado, muy necesario y que me sigue emocionando cada vez que lo veo”.
Imanol destacó que con el documental el espectador gana “El testimonio de <once grandes> que al final se quedará como la certificación de un tiempo muy convulso, muy caótico, pero esperanzador por otro lado. Y que al final refleja que nos tocó a todos de lleno”.
Lo más valioso de esta producción audiovisual de Atrevida Producciones SL & Filmakers Monkeys, según su productora y co-guionista Amanda García-Tapia, es comprobar cómo cada uno de los once protagonistas han sido capaces de contar a cámara algo que jamás hubieran hecho en cualquiera de sus trabajos. Haber brindado la oportunidad de abrir esos corazones con tanta generosidad contando lo que han querido, sin guiones, tan solo con la promesa de hacerlo en positivo y que se saliera de la sala tras verlo “con una sonrisa”, dejando como lección cómo se sobrepone el ser humano a cualquier cosa que le ocurra.

Balance del encierro
En cuanto al encierro, Lolita explicó que a ella le sirvió para aprender muchas cosas. Pero sobre todo: «Ha sido un intercambio de cultura con mi hijo. Desde hacer con él recetas de cocina hasta bailar un TikTok. Pero, en definitiva, la cultura me ha ayudado muchísimo a leer, a pintar a ver documentales, a ver museos que no había visitado… Cosas que él me enseñaba a mí y otras que yo le enseñaba a él. Y creo que eso ha sido una parte bonita de ese encierro”.
Alicia Borrachero contó que ella tuvo la oportunidad de hablar con su hijo, en definitiva de estar con él. “Para mí fue muy especial sentarle y enseñarle el cine porque el formato televisivo es lo que los jóvenes tienen en la cabeza. Mi hijo, el cine en mayúsculas, lo ha descubierto durante el confinamiento. Por otro lado, para mí fue un tema recordatorio el tema de la cultura. No solo leer… la música, la poesía, el alma humana… Es como que ha tenido que venir esta «mierda» para darnos cuenta que la cultura es inherente al ser humano. Y la tenemos como un lujo. Sin embargo, es necesaria. La belleza de la vida está en la expresión de las artes”.
Una atmósfera propicia

Javier Kuhn tuvo muy claro desde el principio cómo preparar un ambiente propicio: “Necesitaba centrarme en el mensaje de ellos, en la palabra, en la oratoria. Por eso creé esa especie de caja negra donde todo es neutro. Solo están ellos. Hay una silla y ellos se sientan y desgranan, vomitan las cosas que contarnos sin distracciones de ningún tipo. El blanco y negro de las escenas me parecía duro pero elegante.
Sin duda un entorno muy elaborado del que añadía: «Y le daba esa cadencia y envolvía el mensaje de tal forma que me parecía que no necesitaba nada más. De hecho, es casi como si estuvieran ellos contándole al espectador su vivencia. Se hace algo tan íntimo, tan cerrado, que al final es el espectador y el personaje y no hay distracción de ningún tipo. Este es un documental de ver, pero sobre todo de escuchar el mensaje, la palabra, la voz, qué nos cuentan, cómo lo cuentan, con qué intensidad y yo creo que eso se nota en el resultado”.
Excelente!! Artículo
Gracias Amparo por este trabajo, por el que atraves de tu escrito, nos sumerges en los momentos que marcaron nuestras vidas y nuestra forma de entenderla hasta entonces. Cada uno de nosotros, cada una de las situaciones queda reflejada en el texto, gracias en mi nombre y en el nombre de todos los que aun padecen y una mirada al cielo desde donde nos observan y animan.
Muchísimas gracias, Carmen. Ha sido toda una experiencia
Muy interesante todo lo que he leído Amparo y Laura, enhorabuena por vuestro buen trabajo
Muchas gracias, José Antonio.
Para mi lo más duro de la pandemia no fue el encierro, fue el miedo por mis seres queridos, no poder ver a mis padres durante meses y después ir a verlos y no poder abrazarlos por el miedo a que yo pudiera ser portadora y contagiarles fueron días muy duros
Fue muy dura la distancia
Fue muy duro ,mi hija me dejaba la compra en la puerta de la casa y de verlos todos lis días (comían en casa ) a no verlos fue horroroso
Cierto. Fue durísimo.
Amparo, genial tu editorial. Vamos, adelante
Gracias, ha sido una gran experiencia
Gracias a las dos,ha sido todo un recorrido.
Muchas gracias a ti, siempre
Fabuloso reportaje
Muchísimas gracias
Muy buen artículo, cómo se nota la pasión que pones en todo lo que haces, gracias por haber aparecido en mi vida
Muchas gracias a ti. Besos