Cartel de Drive en MICINEXIN, revista de cine y espectáculos online

Drive (Nicolas Winding Refn, 2011).

La historia de un misterioso conductor que ve alterada su rutina al enamorarse de su vecina.

Cartel de Drive en MICINEXIN, revista de cine y espectáculos online

Producción estadounidense a las órdenes de un director danés, que se incluye en el género llamado “neo-noir”, una amalgama de lugares comunes del cine negro actualizados a la realidad contemporánea. En este caso, Winding Refn (realizador de la saga “Pusher”), va un poco más allá, y se inspira en todo tipo de referencias de los años ochenta, desde el look y la caracterización dramática, hasta la música.

Fotograma de Drive en MICINEXIN, revista de cine y espectáculos online

El personaje protagonista encaja perfectamente con su intérprete, un Ryan Gosling hierático (pero muy guapo). Sólo cambia su expresión cuando se enfada mucho. Un hombre sin nombre que simplemente conduce, como especialista, como delincuente, para pasar el rato. En el supermercado camina entre las estanterías, la cámara le sigue, incluso ahí también conduce; ve a su vecina, se siente atraído por ella y se aleja, dando marcha atrás. Cuando actúa fuera de la legalidad se pone su chaqueta, blanca con la imagen de un escorpión en la espalda, seña de identidad que nos recuerda al cine de superhéroes. Cuando no conduce, repara coches.

Completan el reparto la actriz inglesa Carey Mulligan, Bryan Cranston (últimamente rescatado como actor de culto), y Albert Brooks (¿Su rol de mafioso puede ser un homenaje contrario a su papel de tipo corriente en Taxi Driver?).

Fotograma de Drive en MICINEXIN, revista de cine y espectáculos online

Destaca la secuencia inicial, donde el pilotaje del coche nos es mostrado desde el interior y exterior del vehículo, pero sólo con cámaras colocadas en el propio coche.

Fotograma de Drive en MICINEXIN, revista de cine y espectáculos online

La música del film corre a cargo de Cliff Martínez, aunque su banda sonora se centra en una serie de artistas de una corriente actual denominada “New Retro”, entre los que destacan Kavinsky (“Nightcall”) y College junto a Electric Youth (“A Real Hero”, tema que acompaña a una tarde inolvidable: el chico por supuesto conduciendo, la chica con su hijo). La música es electrónica, lo que quizás nos da un respiro dentro de tanta banda sonora orquestada y/o clásica aplicada al cine de acción e incluso a la ciencia-ficción, algo que por otro lado antiguamente hubiese sido impensable.

En definitiva, Drive es una película que añora el cine de los ochenta, década que (quién lo diría) parece retornar a nuestras vidas una y otra vez, ahora con más fuerza (incluso en la moda). Películas antes tomadas por malas son recuperadas positivamente, y Drive recuerda a films tan variados y extraños como “American Gigolo” o “Thief”. Pero también a clásicos realizados en los sesenta por Jean-Pierre Melville (“Círculo Rojo”), en especial “Le Samouraï”.

nicolas-winding-refn-talks-drive-2-and-logans-run

La violencia en Drive, y el terrorífico momento del protagonista dispuesto a matar llevando una máscara con un rostro que no es el suyo, nos recuerda que, según el propio Refn, la inspiración inicial para su carrera cinematográfica fue “La Matanza de Texas”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *